Si estás leyendo estas líneas posiblemente estés pensando en reformar tu casa o tu negocio, necesitas mejorar la distribución de tu hogar o simplemente tienes ganas de un cambio de aires.
Si es así, necesitas contar con un buen plan de interiorismo y planificación antes de iniciar la reforma.
Cuando por fin tomas la decisión de hacer una obra, quieres pasar a la acción rápidamente pensando que cuanto antes empieces antes verás los resultados. Esto es un error. A este error le seguirán otros como la falta de coordinación con los distintos profesionales, mala planificación de los tiempos, ausencia de diseño entre los espacios de tu casa, toma de decisiones sobre la marcha para salir del paso, elecciones equivocadas en los materiales, no tener en cuenta la iluminación, olvidarte de tus necesidades o en resumidas cuentas, invertir todo tu esfuerzo para obtener un resultado que podría haber sido muy mejorable.
«La experiencia que hemos tenido con Ana ha sido muy buena. Necesitábamos renovar la casa y darle un cambio de aires. El tiempo que invertimos al principio en pensar qué queríamos y en elegir materiales, colores, mobiliario y decoración en general, fueron la clave para que el resultado tanto de la obra como de la decoración haya sido fantástico»
MARISA Y JOSÉ
Saca el mayor partido a tu reforma
Ya has dado el difícil paso de hacer obra con lo que eso supone en tiempo, dinero y energía, ahora hay que hacer que todo este esfuerzo valga la pena. Cuando cuentas con un proyecto de interiorismo además de solucionar necesidades, ganarás en ideas que ni te habías planteado.
Una interiorista te aporta visión global
Siempre se ven mejor las cosas desde fuera, y si esa mirada es desde la empatía, profesionalidad, experiencia y perspectiva, conseguirás la armonía y la coherencia necesarias para lograr tu objetivo. Por eso es importante empezar un proyecto de interiorismo desde la escucha y el análisis de necesidades.
Ofrece soluciones a tus necesidades
Muchas veces buscamos inspiración en revistas o nos enamoramos de alguna casa en la que hemos estado, pero cada espacio es diferente y lo es porque las personas que viven en él son diferentes también. Es muy importante detectar las necesidades que te han llevado a embarcarte en este cambio para que todas las elecciones que se hagan vayan dirigidas a satisfacerlas.
Te asesora sobre los materiales
Sabiendo ya en qué estilo decorativo se centra el proyecto, solo queda elegir los materiales que lo hagan realidad. Pero además de la parte estética tu interiorista sabrá recomendarte teniendo en cuenta todos aquellos aspectos técnicos y funcionales necesarios.
Un buen diseño de interiores optimiza la distribución de tu casa o negocio. Solo con tirar un tabique o mover una puerta de forma inteligente puedes mejorar mucho la funcionalidad de tu espacio.
Iluminación
Suele ser lo último en que se piensa y sin embargo, es imprescindible tenerla en cuenta desde el principio para que tu proyecto gane calidad y distinción.
Estilo decorativo, coherencia y personalidad
Muchas veces mis clientes compran un sofá que les ha encantado y cuando lo tienen en casa no saben cómo hacer que luzca como debiera, ni incorporarlo al resto de su decoración. Un buen trabajo de interiorismo guiará al cliente para que descubra con qué estilo decorativo se siente más representado y a gusto.
Dirección de obra
Sin duda este es el punto más complejo y el que más asusta y con razón porque son muchas las variables que hay que tener en cuenta para anticiparse y resolver problemas que sin duda surgirán. Una buena planificación y visión global son la clave para minimizar conflictos y lograr el resultado deseado.